Mi Gran Experiencia en Tutorias

Cuando estaba en 3º semestre, mi amiga me presumió que iba a dar tutorías, entonces yo pensé “que flojera levantarse tan temprano y venir a platicar con los de 1º, ay no eso es perder el tiempo”, con el paso de los días al ver tan emocionada a mi amiga, se me antojó la idea de ver qué onda y que era eso de tutorías. Esta personita me había dicho que asistiera a una junta 1 semana antes ya que ahí nos iban a informar de lo que teníamos que hacer y del programa a seguir, pero yo no pude asistir a esa dichosa junta.

Con el paso de los días faltaba se acercaba más y más el día de empezar las tutorías. Entonces decidí acudir con el profe. Valente para preguntarle si todavía podía entrar al programa. El me preguntó el porqué de que quisiera entrar, entonces yo le dije, que por que quería ser más abierta y tener más facilidad de palabra, además porque eso me iba ayudar con mi carrera y de alguna manera me iba a quitar un poco el pánico escénico que yo había ganado en ese primer año dentro del COBACH, eso era por mi parte, pero por parte de colaborar para los chavos, le dije que yo quería estar en tutorías porque quería ayudar a chavos y chavas, para que de alguna forma no pasaran por lo que yo había pasado en segundo semestre, y contarles mis experiencias para que ellos no tuvieran las mismas dificultades que yo.

El profe Valente me dijo que me llegara temprano el viernes para ver en qué grupo me podía acomodar ya que todos los grupos ya estaban acomodados y que no faltaba ninguno. Ese día mientras iba de camino hacia mi casa iba pensando si había sido la mejor decisión, y al mismo tiempo pensaba que les iba a poner a hacer a mis tutorados, como iba a ser con ellos, si iba a ser buena o mala dando tutorías, en fin.

A la mañana siguiente llegó el día y mi primera tutoría la compartí con una amiga de 1º semestre y con la maestra Patricia Contreras. Esa primera tutoría no fue lo que yo esperaba, ya que casi, yo no hablaba, me sentía hasta a veces un poco torpe ya que no era lo que yo me imaginaba. De esas tutorías creo que faltó comunicación entre mi compañera y yo, ya que no nos poníamos de acuerdo acerca de las dinámicas y actividades que haríamos. Así fue pasando el tiempo y dar tutorías era algo que ya estaba odiando, algo que hacía por obligación, yo creo que principalmente fue porque no dormía bien ya que me dejaban infinidad de tareas, de hecho llegó a tal grado mi fastidio que dejaba que mi compañera fuera a dar sola tutorías. Pero fue ahí cuando me di cuenta de algo y aprendí mi primera lección TODO EN LA VIDA TIENE UN SACRIFICIO, YO QUERÍA CAMBIAR MI FORMA DE SER Y TENÍA QUE ESFORZARME.

La segunda vez que di tutorías fue en 4º semestre esa vez me tocó con la maestra Coquito, y fue algo muy padre, a pesar de que los chavo ni me pelaban y me tiraban de loca es ahí cuando te das cuenta lo que sienten los profes cuando ni les haces caso, yo siempre les dejaba algún tipo de tarea o algo así y nunca la llevaban era frustrante, pero empecé a hablar un poco más y a relacionarme con mi tutorados, hasta que la maestra Coquito se fue por su incapacidad pude estar enfrente de un grupo, pero oh sorpresa fue solo una clase ya que ya se había acabado el curso. Algo que era sumamente frustrante para mi era que nunca me enteraba de las juntas, que se hacían con el profe Miguel, o alguna información que mandaba el profe Valente. Creo que en estas segundas tutorías aprendí A PONERME EN LOS ZAPATOS DE LOS MAESTROS Y ES POR ESO QUE AHORA LOS ENTIENDO Y VALORO MÁS.

En 5º semestre pensé que ya no me iban a llamar, ya que era mitad de agosto y nada me decían, pero fui y le recordé al profe Miguel y me dijo que ya estaba contemplada. En ese semestre se unieron al CLUB DE LOS TUTORES muchos chavos de quinto, ya que tutorías se cuentan como acción social. El día que me dieron las listas para saber con quién me tocaba, me dio mucho terror y pensé que de nueva cuenta no iba a lograr absolutamente nada, ya que me había tocado con el profe Javier, mejor conocido como Magic, el cual sabía que tenía su carácter y era medio enojón, pero desde que lo trate para ponernos de acuerdo se borraron absolutamente todos esos temores.

El primer día de tutorías me toco estar sola ya que el profe no pudo asistir. Ese día les empecé a decir a los chavos que material tenían que traer para realizar las actividades que pensaba ponerles. Yo era “estricta” y eso me trajo problemas ya que tuve 2 discusiones con dos chavos, el primero era un niño hasta ese momento un poco sangrón, y todo comenzó por una actitud que él había tomado hacia una compañera, entonces le reclamé, él me contestó y lo saqué del salón.

Hable con los profes MIGUEL, VALENTE Y MAGIC y ellos a su vez hablaron con ese chavo y mejoró su actitud cosa que me hizo sentir bien.

La segunda pelea fue con una chava y esa empezó porque me tiraba de loca y de igual modo ocurrió todo lo que pasó anteriormente, pero con la diferencia de que el profe Valente habló conmigo y me pidió más paciencia. Al paso del tiempo me di cuenta de que NO POR SER UN OGRO CON LOS CHAVOS, ELLOS TE VAN A TRATAR BIEN Y TE VAS A GANAR SU RESPETO O TE VAS A SER AMIGA DE ELLOS, LOS TIENES QUE TRATAR COMO LO QUE ERES UN CHAVO NORMAL COMUN Y CORRIENTE, PERO CON LA RESPONSABILIDAD DE SER TUTOR. NUNCA TIENES QUE IMITTAR EL LUGAR DE UN MAESTRO, POR QUE PIENSO QUE ES LO QUE MAS ODIAN LOS NIÑOS TUTORADOS.

Mi último semestre impartiendo tutorías, creo que fue mi gran examen final, esas tutorías las impartí con alguien especial, ya que no nos había tocado juntas y le pedimos al profe Miguel que nos pusiera en el mismo salón de tutorías.

¿Por qué digo que fue mi examen final? Porque creo que fueron en las que compaginé todas mis experiencias anteriores, creo que a pesar de que solo fueron 5 sesiones PERDÍ EL PÁNICO ESCENICO, FUI RESPONSABLE, CREO QUE EN ALGUNAS PERSONAS CAMBIÉ ALGO, ME DIVERTÍ GENIAL, CONOCÍ A CHAVAS Y CHAVOS INCREÍBLES (a pesar de que casi no iban), PUDE POR FIN HACER DINAMICAS (solo 2), MEDIANTE LAS CUALES CONOCÍ SUS GUSTOS ACERCA DE LA ESCUELA, LO QUE PIENSAN, QUE ODIAN DE ESTA, CREO QUE HICE QUE TRABAJARAN EN EQUIPO, APRENDÍ ACERCA DE ESOS CHAVOS Y ME LLEVE COSAS POSITIVAS DE ELLOS.

Lo único malo que no me gustó, fue que no hubo muchas tutorías, además de que casi los chavos ni iban. Al final cuando le entregamos las listas al profe Miguel, me di cuenta de que una personita que nunca me imaginé que daba tutorías también era tutor, lo cual me llenó de gusto, ya que somos personas súper diferentes las que damos tutorías.

Yo me voy contenta creo que mi objetivo se cumplió, creo que fue una experiencia que jamás se me olvidará en la vida, me llenó de muchas ilusiones, tuve decepciones, pero esas se borraron cuando por fin vi que los chavos salían contentos, se reían y participaban y que aprendían un poco. Faltaron dinámicas por poner pero me divertí.

Creo que las chavas que yo le dije al profe Valente que pueden ser tutoras cumplen con los requisitos, ya que tienen carácter, son divertidas, pueden aprender a expresarse más, entienden a los chavos de 1º y 2º.

Yo tenía el propósito de dejar huella en tutorías y creo que si se cumplió.

Un consejo que les puedo dar a los chavos de 3º y 5º semestre, es que se animen a vivir esta experiencia, es duro levantarse en las mañanas, pero estoy segura que van a aprender mucho y se llevaran gratos recuerdos, además de que crecerán y les ayudará a madurar un poco en la escuela.

Chavos llévense bien con sus tutorados y tutorados llévense bien con sus tutores, no se nieguen a no compartir con estas personas sus vivencias, no se nieguen hacer nuevos amigos, les ayudará para siempre.

Doy las gracias a mis compañeros que me acompañaron de tutores y a mis maestros que fuero un gran apoyo.

PROFE VALENTE GRACIAS POR PERMITIRME VIVIR ESTA EXPERIENCIA, QUE ME MARCÓ
PROFE MIGUEL ANGEL GRACIAS POR EL APOYO QUE SIEMPRE NOS BRINDA Y POR LAS FACILIDADES QUE NOS OTORGÓ PARA HACER POSIBLE VIVIR ESTA EXPERIENCIA

A AMBOS GRACIAS POR PREOCUPARSE POR LOS CHAVOS QUE SON DE NUESVO INGRESO Y POR LOS DE 3º Y 5º, QUE COMO YO TENEMOS INQUIETUDES Y QUEREMOS CAMBIAR ALGO DE NOSOTRSO, PARA SER MEJORES PERSONAS. MIL GRACIAS Y SIEMPRE ME ACORDARE DE USTEDES.

ATT:
UNA NIÑA QUE NUNCA CREYÓ QUE SIRVIERAN DE ALGO TUTORIAS, Y QUE LA HICIERON CRECER.